Son los minutos que ha durado la sesión de autógrafos de Nathalie Baye, excepcionalmente larga, después de la proyección del cortometraje dirigido por Laura Smet, titulado Thomas, y del largometraje Moka, dirigido por Frédéric Mermoud. Este año no se ha puesto límite al número de personas que podían asistir a la sesión de autógrafos. Nathalie Baye se ha prestado al juego hasta el final.