El 8° Panorama de cine francés en China se celebra desde el 5 de abril en 4 ciudades chinas: Pekin, Chengdu, Shenzhen y Hangzhou.
La delegación artística, compuesta por los directores Zabou Breitman (No et moi), Jacques Cluzaud (Océans), Alix Delaporte (Angèle et Tony), Marc Fitoussi (Copacabana), Alain Gagnol (Une vie de chat), Hervé Mimran (Tout ce qui brille) la actriz Delphine Chuillot (Nannerl, la sœur de Mozart), el compositor Evgueni Galperine (L’Homme qui voulait vivre sa vie), así como por el presidente de uniFrance Films, Antoine de Clermont-Tonnerre y por Frédéric Brillion, productor de Epithète Films, se trasladaron a China entre el 7 y el 11 de abril : tres días en Pekín antes de dividirse entre Chengdu y Shenzhen/Canton durante otros dos días.
En Pekín, 2700 cinéfilos acudieron a la Cinemateca Moma y al cine Star City, dos salas del grupo Broadway que exhibían la selección durante los cinco primeros días. La delegación artística que estuvo presente podrá testimoniar que las salas se llenaron y de que le debate posterior a cada proyección con el público duró a veces más de una hora.
La velada de inauguración del Panorama, a golpe de alfombra roja, invitados famosos, interesados y periodistas, se celebró en el Sanlitun Village, barrio concurrido por muchos expatriados pero también por la juventud dorada china, amén de aficionados al arte y a la moda. Después del cóctel servido en The Orange, salón de recepción y exposición, los invitados pudieron descubrir la cinta Potiche de François Ozon, que causó gran impresión y que bien podría animar a su comprador, Sen Lys, a estrenarla en sala.
Antoine de Clermont-Tonnerre, Frédéric Brillon y Xavier Lardoux aprovecharon su estancia en China para reunirse con funcionarios y profesiones chinos con el fin de solicitar un aumento de cuotas para los filmes franceses en la salas chinas,cada vez más numerosas. De esa manera se podría aplicar más fácilmente el acuerdo de coproducción firmado el año pasado entre los dos países y animar a las distribuidoras y canales de televisión chinos a emitir cine francés en salas y en la pequeña pantalla. Por último, en una reunión con Yuku, principal plataforma de VOD china (35 millones de visitas diarias) se esbozó la idea de crear una asociación con la 2 edición del festival en línea en enero de 2012.
Además de presentar su obra al público, cada uno de los artistas participó en clases magistrales y charlas con estudiantes chinos. Zabou Breitman, por ejemplo, recibió una cordialísima acogida en el Liceo 81 de Pekín donde 150 escolares de 15 años debatieron con él las distintas actitudes frente a la adolescencia, según las distintas culturas, tan alejadas y tan próximas a la vez, tal como se traslucen en la película No et moi. Alain Gagnol, por su parte, dio una clase de animación basándose en la cinta Une vie de Chat mientras que Jacques Cluzaud se aventuró a una lección de oceanografía ante un centenar de estudiantes de la Universidad de Cantón, fascinados por las distintas especies de peces mostradas en la película.
Las cintas fueron vistas por un total de 1300 estudiantes que en Pekín y Cantón asistieron a las clases magistrales de los miembros de la delegación.
En Shenzhen 3500 acudieron a disfrutar de la selección de cine entre el 11 y el 16 de abril. Copacabana, proyectada durante la velada de apertura, gustó inmensamente a todos los espectadores presentes.
Además de los 10 largometrajes previsto para este año, 11 cortos, subdivididos en dos programaciones también lograron llenar las salas con unos espectadores que, a la salida, se preguntaban el por qué de esta forma particular de hacer cine que desde hace cuatro años les convencía cada vez más. Como de costumbre, las preguntas del público giraron en torno a los medios de que se dispone en Francia para producir, dirigir y emitir cortometrajes. Pero, lo nuevo este año fueron otros comentarios, acertadísimos por cierto, sobre el contenido de las películas de largometraje llegando incluso a indicar que, al fin y al cabo, cortos y largos no son tan distintos si no fuera por la duración.
Pero fue en la Universidad de Jinan, en Cantón, donde, ante 150 estudiantes, pudimos calibrar hasta qué punto nuestro sistema francés es considerado como referente a imitar por parte de muchas personas, profesores incluidos, para desarrollar en China un arte que, sin ser nuevo, se practica muy poco fuera de las escuelas : el cortometraje. Cuatro de los cortos se están exhibiendo actualmente en el 2nd China International (KingBonn) New Media Shorts Award de Shenzhen.
El Panorama de Cine Francés en China no ha terminado aún ya que las películas se están proyectando ahora en los cines de Hangzhou para luego volver a Pekín, donde se mostrarán durante dos semanas más en el Instituto Francés.