Pese a la difícil coyuntura 2012 para el cine en Portugal la cuota de cine francés s muestra insolentemente sana.
Las cifras de espectadores y de recaudación siguen cuesta abajo desde 2010: 13,8 millones de espectadores (- 12%) y 74 millones de euros (-7,5%).También acusa un descenso el número de pantallas (de 558 a 551 en 2012) repartidas en 160 complejos (5 menos que en 2011). Son propiedad, en un 53%, de los 4 exhibidores principales: Zon Lusomundo, Socorama, UCI y New Lineo Cinemas. Al acabar 2012, Portugal contaba con 392 pantallas digitales. Entre los cuatro, reúnen 91,1% de los espectadores.
De los 288 títulos estrenados en las pantallas portuguesas en 2012, 137 fueron producciones americanas, 26 portuguesas y 66 francesas. Vemos pues que Francia se impone como segunda oferta cinematográfica en territorio luso, después del cine de Hollywood (73,3%) ostentando una excepcional cuota de mercado de 7,17% frente a la del cine nacional de 5,3% (la más elevada, por cierto, desde 1975).
El cine francés
Tras la progresión observada ya en 2011 (+43,2%), las películas francesas registran un incremento de 91% en 201, incremento debido, principalmente, a las películas en francés que aportan 615 621 espectadores al total de 990 686. Nuestras producciones rebasan pues el récord de 2008 (año de Astérix aux Jeux olympiques).
El país sigue profundamente sumido en la crisis económica y el cierre de 49 salas, de 106, del segundo exhibidor más importante del país (Socorama) augura un año 2013 particularmente difícil.
Para los distribuidores independientes, el acceso a las salas resulta cada vez más problemático teniendo como tienen que estrenar las películas con un número exiguo de copias.
Zon Lusomundo (exhibidor y distribuidor) sigue siendo muy fiel a nuestra cinematografía, como lo prueban las 31 producciones francesas que estrenó, cuando Clap Filmes/Atalanta Filmes sólo distribuyó 9. Figuran a continuación, Midas Filmes con 7 filmes y Alambique con 5.
Con más de 600 000 espectadores para La Cage dorée (foto), 2013 se presenta como el año de todos los récords para el cine galo en tierra lusitana.