Este 22 de junio ha sido un día especial, un cumpleaños, el de los veinticinco años del Festival de Cine Francés de Japón , un festival que sigue siendo capaz de atraer a un público enorme, formado por apasionados cinéfilos, habitantes de Tokio.
Este año una vez más, ha viajado desde París una magnífica delegación artística, liderada por Catherine Deneuve, madrina de esta edición, y en cuyo homenaje el Instituto Lumière de Lyon ha creado una pequeña película que se ha proyectado ante un público de 900 personas. La sala entera ha vibrado de emoción, conmovidos todos los espectadores ante este montaje hecho con imágenes de las películas francesas más bonitas de los últimos 50 años. La emoción llegó a su punto máximo cuando la gran estrella salió a escena, acompañada por Jean-Paul Salomé e Isabelle Giordano, Presidente y Directora General de Unifrance. A continuación, subieron también a escena Isabelle Huppert, Paul Verhoeven, Danièle Thompson, Édouard Baer, Katell Quillévéré, Trần Anh Hùng, Martin Provost, Anne Fontaine y Lou De Laâge, después de haber estado el día entero atendiendo a los periodistas japoneses y promocionando sus películas.
Y después subió a escena Takeshi Kitano, quien, tras un par de chistes sobre Shinzo Abe, primer ministro japonés, que hicieron partirse de risa al público, retomó un tono más serio para rememorar el valor del cine francés, desde Gabin hasta Gainsbourg. El padrino de nuestro festival, ha querido corresponder con esta dedicatoria al público francés, que lo lleva admirando justamente… 25 años.
Momentos después, se abría el telón para dar paso a la película de apertura, Dos mujeres. El cine volvía a ocupar su puesto, por un lado, y la vida nocturna de los tokiotas retomaba su curso, por otro.