La Fiesta Internacional del Cine de Roma se ha celebrado entre el 28 de octubre y el 5 de noviembre
Las dos cintas francesas concursantes han sido acogidas con gran entusiasmo: Les Petits mouchoirs de Guillaume Canet está a punto de conseguir distribuidora (el director se ha reunido ya con varias de ellas) mientras que con su actuación en L'Homme qui voulait vivre sa vie, Romain Duris ha logrado causar gran impacto en la prensa italiana.
La producción franco-belga Kill me Please de Olias Barco, por su parte, ha ganado el Marco Aurelio de Oro, máximo galardón del festival. Se trata de una comedia negra sobre el tema de la eutanasia, con Aurélien Recoing, Virginie Efira, Benoît Poelvoorde y Bouli Lanners, Kill Me Please.
En la mayoría de los casos, las salas se llenan y el público es joven y entusiasta. La prensa y las distribuidoras italianas tienen gran empeño por el festival que ya cumple su quinta edición, y que parece estar logrando su velocidad de crucero.
El mercado de Roma (la “business street”) sigue con su original configuración, sin stands reservados y en que todo se desenvuelve en un único lugar, que crea un ambiente convivial y relajado en la terraza del hotel Bernini. Los franceses estuvieron especialmente bien representados siendo la mitad de las exportadoras presentes. Un único bemol: las salas de proyección distaron mucho de llenarse.
La Business street se sitúa como “post-Toronto” y “pre-AFM”. Este año, la cercanía en el tiempo del mercado de Los Angeles ha sido un obstáculo para ambos mercados porque algunas distribuidoras europeas decidieron no ir a los dos sitios.
El mercado de Roma organiza, además, múltiples conferencias destinadas en general al mercado italiano así como también un mercado de coproducciones selectivo y eficaz, especializado en proyectos de segundo largometraje (la Nueva Red de Cine) …
La Embajada de Francia y Unifrance, por su parte, organizaron una velada en honor de la cinematografía francesa, el 29 de octubre en la que pudimos cruzarnos con Guillaume Canet, Fanny Ardant, Cécile Cassel, los productores y exportadores presentes en Roma así como gran número de distribuidores y periodistas italianos.