Destinado a la protección infantil, este centro parental acoge a aquellas personas para quienes la paternidad es algo complicado. En este centro, los sentimientos y las emociones están a flor de piel, y las fronteras entre la protección y los problemas, entre los consejos y las advertencias, entre reparación y separación, son muy finas. Por un lado, dos chicas jóvenes aprenden a ser madres, no sin rebeldía. Y por otro, una pareja viene a dejar a su hijo para que lo adopte otra familia.