El joven Sulayman vive en Marruecos, en una región llamada "la roca de arcilla", en harmonía completa con la fauna y la flora. El joven es orfelino y ha crecido junto a un anciano al que llaman el hombre "de las venas turbulentas".
Sulayman conoce a Khadija, la hija del jefe de una tribu de una gran región. Este cacique, ávido de poder, ve con malos ojos el matrimonio de su hija con un pastor.
Cuando estalla la Segunda Guerra Mundial, el pastor tiene que enrolarse a la fuerza en el ejército francés y recorrer tierras desconocidas, tan intrigantes como peligrosas. Al vivir con horror las atrocidades de la guerra, Sulayman decide buscar por todos los medios una forma de humanidad para estos soldados marroquíes, olbigados a luchar en un conflicto que no les concierne en nada...
Más que una película sobre la guerra, "Los hombres de arcilla" es ante todo una fábula sobre la condición humana.