El 22 Festival internacional de cine francófono de Namur , que se celebrará del 28 de septiembre al 5 de octubre, acaba de desvelar su programa, tan prolijo como de costumbre.
Este año se incluye en la competición oficial tanto documentales como obras de ficción. 15 cintas figuran en la progamación, entre ellas, Cow-Boy, el último largometraje de Benoît Mariage con el que se abrirá el evento.
La representacion de los paises francófonos fuera de Francia destaca por Le voyage du ballon rouge del taiwanés Hou Hsiao Hsien, y por Sous les toits de Paris del turco Hiner Saleem.
Por parte francesa, el documental de Sandrine Bonnaire Elle s'appelle Sabine comparte la selección con 24 Mesures de Jalil Lespert, Le Fils de l'épicier de Eric Guirado, y J'ai toujours rêvé d'être un gangster de Samuel Benchetrit con la que se cerrará el festival.
Andalucía del senegalés Alain Gomis, Kinshasa Palace del congolés Zeka Laplaine, Délice Paloma y La Maison jaune de los argelinos Nadir Moknèche y Amor Hakkar representarán al continente africano, mientras que Rumania (Le reste est silence de Nae Caranfil), el Líbano (Sous les bombes de Philippe Aractingi) y Quebec (Bluff de Simon Olivier Fecteau y Marc André Lavoie, Continental, un film sans fusil de Stéphane Lafleur) completan el amplio abanico.
Bélgica goza de una nutridísma representación de más de sesenta películas de todos los géneros, entre ellas, las coproducciones La Face cachée de Bernard Campan y Max & Co de Frédéric y Samuel Guillaume. Otras cintas menos recientes como La Raison du plus faible de Lucas Belvaux y Nue propriété de Joachim Lafosse se proyectarán en cambio en sesiones especiales.
