Pio tiene 14 años y quiere crecer rápido. Igual que su hermano Cosimo, Pio bebe, fuma y aprende los pequeños tejemanejes callejeros.
Un día, Cosimo no va a poder defender más a la familia. Entonces le va a tocar a Pio recuperar el puesto. Pero el papel le queda un poco grande. Pio va a confrontarse a una decisión imposible.