Varias cintas francesas empiezan con buen pie su recorrido por las salas del extranjero.
En Estados Unidos sigue intacta la afición al cine francés. Entre las coproducciones, Silent Hill de Christophe Gans se coloca de ganador indiscutible de la temporada con 7, 7 millones de espectadores y 47 millones de dólares recaudados. Destacan igualmente los estrenos americanos de Banlieue 13 de Pierre Morel y el notable éxito de Vers le sud de Laurent Cantet. La primera cinta, estrenada el 2 de junio por Magnolia Pictures con 20 copias, logró 200 000 espectadores. La segunda, estrenada en julio con 24 copias se ha hecho ya con un total de 70 000 espectadores.
Otra buena nueva : a las pocas semanas de exhibición, varias películas francesas han superado la cota de los 100 000 espectadores en varios territorios con Silent Hill en cabeza: México (809 000 espectadores), España (578 000 espectadores), Reino Unido (513 000 espectadores), Alemania (410 000 espectadores) e Italia (387 000 espectadores). Astérix et les Vikings de Stefan Fjeldmark y Jesper Moller gusta a todos los europeos, tanto del Norte como del Sur: Dinamarca, 130 000 espectadores, Noruega 42 000 espectadores – dos países de tan sólo unos 5 millones de habitantes! -, España 140 000 espectadores y Portugal (más de 52 000 espectadores).
Sin olvidar los resultados de La Doublure de Francis Veber con 121 000 espectadores desde el 9 de junio en España y OSS 117, Le Caire nid d'espions de Michel Hazanavicius con sus 166 000 espectadores desde el 21 de julio en Canadá (Quebec).