Frig se divide en tres partes: Amor, Mierda y Esperma, y se presenta como una ficción experimental que empieza en el final de una relación sentimental.
En palabras del director, "el amor y la experiencia propia me sirven como una metáfora que va más allá de lo personal, que me lleva a pensar sobre los ciclos de la vida, a pensar sobre la vida misma, sobre la muerte y el renacer".