Pierre está enfadado a muerte con su hermano Paul desde que le robó su novia, Elizabeth, hace ya diez años. Por nada del mundo quiere volver a verle.
Sin embargo, su supervivencia depende de él: Paul es uno de los raros donantes compatibles para un trasplante de hígado que hay que practicarle urgentemente.
María, futura mujer de Pierre, le anima para que intente convencer a su hermano de que le done un trozo de su hígado. Con este fin, incluso acompaña a Paul, representante de productos de talasoterapia, en su gira por la costa atlántica.
En el transcurso de esos encuentros sembrados de continuas explicaciones, riñas, separaciones y reconciliaciones, los dos hermanos se enriquecen mutuamente e intercambian sus puntos de vista sobre los pilares de la vida, es decir los coches, la calvicie, los bares de putas, los pantalones sin pinzas y los baños de algas…..
Sin que por ello ninguno de los dos pierda nunca de vista su respectivo y opuesto objetivo: para Pierre, convencer a Paul de que acepte la operación, para Paul encontrar la forma de escaquearse.