Paul, de treinta y cinco años, se encuentra en una situación difícil: vive dividido entre el placer que le procura su adicción al juego y el pago de las deudas a los acreedores, cada vez más presentes.
Paul, de treinta y cinco años, se encuentra en una situación difícil: vive dividido entre el placer que le procura su adicción al juego y el pago de las deudas a los acreedores, cada vez más presentes.