Un agente inmobiliario, seguro de si mismo, enseña el mismo piso a cinco potenciales compradores, adaptando la presentación según la ocasión. Los argumentos de venta, incluso si se refieren a los mismos aspectos del piso, se oponen y se contradicen, para poder seducir mejor al cliente en su categoría. El vídeo se vuelve interesante al mostrar la tensión entre la variedad de los argumentos sobre una misma imagen, un elemento único.