Rose da marcha atrás en la rotonda, se ha pasado la salida. Rose le ha regalado un perfume Chanel a su hija, es el tercero este mes. A Rose le gustaría enamorarse, pero ya no sabe entrar en el Internet. Rose le ha dado veinte euros de propina a la camarera. A Rose se le ha olvidado lavarse el pelo. Rose ya no encuentra compañero para jugar al bridge. Rose ha escrito el código de la tarjeta en la funda de la tarjeta. A Rose le parece que sus hijas se preocupan demasiado por ella. A Rose nadie le invita más a salir. Rose come alimentos de lujo caducados. Rose no quiere para nada acabar enloquecida. A Rose se le ha olvidado como se llama su enfermedad. Rose quiere que le dejen en paz: es autónoma.
Rose está más bien en forma. Pero, ¿qué le queda de su vida?