El llamado caso Outreau se recordará siempre como símbolo del error judicial : un juez frío e incompetente, unos niños mentirosos, una acusadora mitómana y, al final, unos adultos cuya inocencia se declara por fin después de años de detención provisional y dos juicios muy mediatizados. Pero, ¿ha sido Outreau realmente un fiasco judicial ? ¿Y si el escándalo procediera de otra parte?
Diez años después, la película escudriña los entresijos de un asunto que ha traumatizado a la opinión pública, además de fragilizar a la judicatura. Por primera vez, magistrados, expertos psiquiatras, periodistas y políticos consienten en participarnos sus vivencias durante el caso Outreau. Su relato se aparta bastante de la historia oficial, abriendo paso a otra verdad distinta: la de unos niños obligados a callar por la fuerza y unos derechos pisoteados.
Audiencias en que se llega a las manos, nichos instalados en el banquillo de los acusados por falta de sitio, abogados defensores como únicos interlocutores de la prensa y un juez echado a los leones con el asentimiento de los políticos : la película nos proporciona una nueva lectura del mal funcionamiento del sistema judicial incitando al espectador a interrogarse sobre la curiosa relación que se entabla entre justicia, política e información.